Según datos del 2019, el 25% de los niños malagueños estudian en un colegio privado en Málaga. No es una cifra realmente alta pero sí es significativa en la educación malagueña. Y es que el nivel educativo que ofrecen las escuelas privadas obliga a competir a todas las escuelas en un mayor nivel. Esto sí ha hecho que el nivel educativo de la provincia se refuerce con los años hasta llegar a ser el baluarte de Andalucía, una Comunidad Autónoma que le cuesta llegar a los niveles en educación que presentan otras regiones de España.
La ruptura con el tradicionalismo
Antiguamente, un niño español estudiaba en un colegio privado porque sus padres habían hecho lo mismo. Así, jesuitas, salesianos, mercedarias y otras compañías religiosas se han nutrido de una tradición española que tiene más que ver con la moral que con la educación. Sin embargo, los tiempos han cambiado, y mucho.
Hoy los padres que deciden llevar a sus hijos a un colegio privado en Málaga lo hacen también para poder ofrecer una educación alternativa a sus hijos. Conscientes de que el mundo ha cambiado, sabemos que los valores de integración y diversificación que ofrece una escuela internacional son mucho más útiles en un mundo como el de hoy que no se cierra a sí mismo, y al contrario, no para de abrirse.
El auge de las pedagogías alternativas
El sistema educativo trabaja con una pedagogía que piensa en el niño como una máquina de adquirir conocimientos. Y si bien es verdad que la capacidad de los seres humanos es muy grande desde bien pequeños, el fracaso llega cuando tratamos de hacer entender los conceptos a través de la repetición de fórmulas generales. El sistema no se adapta a las personas sino que son las personas las que se deben adaptar a él. El que se adapta, lo hace con riesgo de adquirir la sumisión como un valor primario en su vida y el que no se adapta, sencillamente fracasa.
Pedagogías alternativas como la del método Montessori comenzó trabajando con niños marginados, ideando un sistema adecuado para integrarlos en la sociedad y llevan años trabajando en otros lugares (con resultados increíbles). Hoy es toda una revelación en nuestro país. Los que se atreven a pensar más allá de la norma, no dudan en llevar a sus hijos a una escuela internacional, en la que su hijo pueda conocer personas con distintos orígenes y adaptarse a ellos como un igual, al tiempo que se aplica un método de estudio que produce personas libres y con capacidad para decidir sobre su propia vida.
La escuela internacional Montessori Caracoliris, en Alhaurín de la Torre, es el lugar perfecto para educar a niños en un buen ambiente de solidaridad y desarrollo personal. Conócenos.